lunes, 7 de noviembre de 2016

CAMUS, 103° Aniversario

*Mondovi, Argelia,7 Noviembre de 1913,pierde a su padre en la batalla del Marne. Su madre española, Catalina Sintés, trabaja de doméstica para mantener la familia, mas el sistema de igualdad aplicado por los franceses, después de la Revolución,"los estudios abiertos al talento". Estudia en la Universidad de Argel, en política es antifascista y se adhiere al Partido Comunista en 1934, mas porque se silenciaban las injusticias del colonialismo, desde cuando Francia anexó su país en 1836. Escribió obras de teatro en Argelia, vende accesorios para automóviles y se convierte en periodista en "Alger Républicain. Aparece su obra "Calígula" en 1938; aparecen ensayos suyos sobre el absurdo, que se convierten en "Le Mythe de Sisyphe", recopila sus ensayos, publica "L'Ëtranger"; al entrar en guerra, llega a París y trabaja en "Paris-Soir", para luego retornar a Orán y trabajar como docente, en 1941, época cumbre de su etapa más famosa, donde describía la belleza de la costa africana, la luminosidad de un sol inextinguible, y la ética, el comportamiento y lengua de los argelinos, tierra de europeos franceses, españoles, italianos, judíos y bereberes o árabes, desgarrada por la violencia entre europeos e indígenas musulmanes, por el fellagha árabe,donde él se sentía plenamente a gusto, a pesar de su cultura burguesa-francesa moderada, y su condición de estudiante pobre, por lo que se esmera en escribir con una rara y apreciada elegancia, que en sus personajes argelinos quedaban desubicados por su refinamiento y metropolitanismo, al contrario de Jean Paul Sartre, burgués de nacimiento, quien escribía en francés coloquial, oscuro y desprovisto de brillantez.

Para 1945 Camus escribe en la prensa parisina: La personalidad árabe será reconocida por la personalidad francesa, pero para ello es preciso que Francia exista... "Hay que elegir", gritan los que están llenos de odio. ¡Yo sí he elegido! ¡He elegido a mi país, he elegido la Argelia de la justicia, en la que los franceses y árabes se asociarán libremente. Camus siempre empleó un lenguaje político en que se hablaba de libertad, justicia, de la violencia y de la rebelión, en términos abstractos, con el acento de un moralista severo a propósito de la violencia revolucionaria; "vivir de pie", pero en cuanto a los árabes argelinos, debían estar sometidos a Francia, y en Suecia, al recibir el Premio Nobel, en 1957, afirmaba: Siempre he condenado el terror... Creo en la justicia, pero defendería a mi madre antes que la justicia. Antes del accidente que le causó la muerte en 1960, ha dejado a la posteridad su influyente obra literaria: "El malentendido, Los justos, Estado de sitio, La peste, La caída, La sangre de la libertad". La síntesis de su obra y pensamiento, quizá fue sintetizado por su último contradictor, J.P. Sartre: Camus encarnaba en este siglo, y contra la historia, al hereder actual del antiguo linaje de moralistas cuyas obras constituyen quizá lo más original de las letras francesas. Su humanismo obstinado, estrecho y puro, austero y sensual, sostenía una lucha incierta contra los acontecimientos densos y deformes de la época... Cartesiano del absurdo, se negaba a abandonar el suelo firme de la reflexión moral, para aventurarse por los caminos inciertos de la 'práctica'. Ahora se acabó. El escándalo singular de esta muerte es la abolición del orden humano, por irrupción de lo inhumano . [ *¡Bon Sort!!**
Jairo Tapia Tietjen , jtt.stspiritu2@hotmail.es

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