domingo, 24 de septiembre de 2017

Rigoberta sin fronteras

Nacida en  una aldea maya en Guatemala en 1959, es una activa defensora de los DD.HH. de su pueblo, la mujer y emblema de las garras de la mujer latinoamericana que lucha por la conquista de sus más caros principios de solidaridad, equidad y justicia social.
    Sus padres y cuatro hermanos fueron asesinados por paramilitares  financiados por el gobierno, otros  dos se refugiaron en la guerrilla y ella a exiliarse en México . Los  sanguinarios fascistas  y diplomáticos  de su patria manchados de sangre  presionaron  a la Academia sueca para que no le concedieran el Premio Nobel de la Paz, en reconocimiento a la lucha de más de 500 años contra los actos de opresión, marginación, represión y muerte, para más de 90 millones de indígenas desde la Colonia española hasta la fecha.
   Presentamos el poema "NOSTALGIA"  de su autoría:

Arquitectura y belleza multicolor de la naturaleza
silueta del universo, rostro pecoso y marchitado de tanto cortar
algodón, café y cañ de azúcar, manos tiernas, creadoras, ásperas
y callosas por rajar la leña bajo el temascal ardiente del padre sol.
Pies grandes, tiesos como las rocas cruzando veredas,
charralera y caminitos de la madre tierra, por donde solo pasan
monos, ardillas, hormigas, bichos raros y pájaros nunca vistos.
Quetzal en verdecidad de esperanza y de futuro.
Quetzal de pecho rojo, rojo ardiente de lucha y de coraje
por tanta sangre y tristeza que han visto tus ojos.
Es ella, es la Juanita la que conoce el más allá
de una muerte, es la xiba, la comadre, la tejedora del mañana.
Es la marimba frágil de mi tierra.
Es Mariíta la patojana de dña Marta Zacarías.
Es la compañera que encendió fuego por donde pasó.

Voz hembrita de  Quetzal, nietita de los mayas
siempre metida en el monte luciendo y viviendo
esa antigua memoria que pocos del mundo lo conocen.
Siempre pintando uno por uno los hilos de tu güipil multicolor.

Es mi madre torturada, es mi hermana, es mi nieta,
es aquella que rectificó después de un señalamiento colectivo.
Es la compañera que apenas culminó una larga
caminata por rumbos, charraleras y veredas,
subiendo y bajando cerros sembrando mucho maíz.
Es la mujer que guardó sus gritos y cantos de júbilo para mañana.

Madrina, comadrona y curandera
del amanecer y de la luz, de mirada
llena, sincera, tranquila y tierna
como las estrellas, el viento fresco y
los cantos del amanecer y la claridad.

Es la que cruzó fronteras y no le dio
tiempo despedir el novio desaparecido.
Es la que gritó la verdad por el mundo,
dijo un discurso frente a militares asesinos
y no se le terminó la voz.
Es la que venció su miedo, aceptó ser acompañada
por la soledad de lejanas tierras, cruzando
fronteras esperando un avión de allá pa'acá, de acá pa'allá.

Es la hija,  la nieta de los mayas.
Es la que nació bajo el cielo azul.
Es la memoria de Chimel.
Es para tí hermosa mujer de mi tierra.
Rigoberta Menchú
jtt.stspiritu2@hotmail.es  [  WikiLetras: panoramacultural.com.co ]






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