*¡¡ Inconcebible y lamentable espectáculo antiperiodístico que pisotea la memoria de Gabo!! La ocasión fue la premiación en Medellín al Nuevo Periodismo Iberoamericano, celebrado para agazajar el recuerdo del García Márquez periodista y su legado a nuestros pueblos. Lamentablemente fue todo lo contrario al descontextualizar los hechos y circunstancias que, precisamente fueron el norte y la meta del Nobél colombiano. Pues lo que presenciamos ayer en Medellín fue el aberrante desvío y vulgar desprecio desdeñoso premeditado de los verdaderos propósitos y alcance del carácter particular de la obra garciamarquiana. En primer lugar, se concentraron los esfuerzos -- en esta lamentable somatela-- en sustraerle a gabo su compromiso político con base en el contexto local, el sustrato real y de su compromiso social en que se apoya su universo d ficción. Tal tinglado del despropósito casi se logra al reunir, en lo que debería ser un recinto sacro, un conglomerado despistado de antiguos allegados dl aracateño en sus labores periodísticas en los convulsionados años sesenta's, cuando él mismo renegaba de la escritura pues en todas las latitudes estaba al servicio de sátrapas latinoamericanos sanguinarios al servicio de la CIA y los crónicos imperios: Enrique Santos, Rafael Pardo, Sergio Ramírez, un periodista Anderson de N. York, y hasta alcanzamos a ver en primera fila a la crema defensora del periodismo arrodillado en nuestra América criolla, rodeando al dudoso adalid social, Rubén Blades. Sin duda, todos del estratos seis de los intereses empresarios y politiqueros. Ningún notable de la oposición colombiana actual antimperialista, que se debate en la lucha ante los fondos buitre, USA y la banca mundial del starsystem que promueven el inmovilismo. Perverso status quo al que GABO se opuso vehemente en su narrativa, denunciando la nula transformación de esa miserable realidad social y su reiterada misión testimonial de denuncia de las reprimidas conmociones populares por sus crónicas carencias. Muy lamentable que este conciliábulo haya hecho el quite a la torera a la preocupación legítima que Gabo tuvo ante los problemas insolubles latinoamericanos, constantemente analizados por sus amigos y líderes de nuestro hemisferio afrocaribeño, con la perenne presencia de Fidel, Chávez, Gabo, Fuentes y tantos pensadores nuestros que intermediaban y aconsejaban para solucionar conflictos ante mandatarios conscientes en sus ámbitos territoriales, y evitar despilfarros de esfuerzos, equilibrar acciones consecuentes con sus ideariums y necesidades colectivas insatisfechas durante siglos, lo cual GABO, -- repito, previó y él mismo subrayó indeleblemente : "Todo es real en Latinoamérica. Cada obra artística y novelas surgidas de la pluma de cualquier escritor tendrá --sin remedio-- un contenido político".----¡¡BON SORT¡¡ ( jtt.stspiritu2@outlook.com ) ---
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